Volví. Ya se rompió. Todo se rompió, incluido mi corazón.
Hacerme la fuerte no funcionó, es cierto, terminé explotando con los ojos
anegados de lágrimas. Debo decir adiós, esta vez para siempre. Dentro de todo
lo mal que pudo terminar, terminó fatal. Borrón y cuenta nueva. Me hiciste daño por ser como eres no por un
hecho malo. Es complicado de explicar eso que teníamos ¿verdad? Sin embargo, pienso que si nos queríamos, a
nuestra manera pero suspirábamos el uno por el otro. Todo se rompe, nada es
para siempre ¿no?
Aunque no te preocupes, solo necesito tiempo para olvidarte. En mi
memoria, siempre quedarás guardado como algo muy bonito, lo mejor que he tenido
hasta ahora. Me hiciste sentir lo que nunca nadie había conseguido. Por ello te
estaré eternamente agradecida, me quisiste como sabías. No me sirvió, lo
siento.
Una última cosa, siempre te querré.