viernes, 30 de septiembre de 2011

Supongo que ahora soy yo la que me cansé. Me mentía a mi misma diciendo que no podía, que eras como mi adicción (que en el fondo si lo eres), pero no  era no poder, era no querer. Ahora quiero, supongo que es lo que tiene sentirse débil. Sé que no será fácil pero nada que valga la pena lo es. Y no sé si valdrá la pena o no, ni cuánto tiempo tardaré. Lo que sí sé es que si la gente puede dejar de fumar, yo puedo dejar de quererte.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

- Déjame en paz, en serio.
+ Pero ¿por qué? ¿Qué he hecho ahora?
- Nada, tú en tu mundo nunca haces nada. Da igual, déjame, desaparece como has hecho en otras ocasiones. A la larga será lo mejor para ti y para mí.
+ Pero no te entiendo, el otro día estabas de acuerdo en todo, no estabas enfada y de repente te comportas así conmigo.
- ¿Sabes porque me comporto así contigo? Porque cuando me besas me derrito y cuando me rozas la piel, se me pone la carne de gallina. Porque cada vez que te causo una sonrisa me recorre un escalofrío de los pies a la cabeza Y porque… porque te quiero, coño, te quiero.
+ Joder, esto se me ha escapado de las manos. Pero yo te dije que no quería hacerte daño, que solo era un juego… y me dices esto.
- Lo siento, en serio, siento joderte las reglas de tu puto juego. Pero tranquilo tú ganaste la partida, yo la he perdido, pero la perdí a lo grande.

jueves, 22 de septiembre de 2011

Me acabo de dar cuenta  ahora mismo. Sentada, viendo la televisión como si nada ocurriera. Y estoy metida en un gran huracán. Es como si estuviera metida en un avión y durante todo el camino solo hubiera grandes turbulencias que me revuelven la cabeza. Dios, mi vida paso de la tranquilidad absoluta a la viveza parcial. Últimamente dudo de hasta mi nombre y ya no hablemos de sentimientos…porque en eso estoy más pérdida que un naufrago en el mar. Me pierdo por culpa de sus besos, de sus caricias, de sus idas y venidas. Roza su mano con mi piel, y se me pone la carne de gallina. Me pierdo por él, pero aún así creo que no lo quiero o quizás…  ¿nunca dejé de hacerlo?

domingo, 11 de septiembre de 2011

Y de repente sobre tu cabeza se instala un conjunto de nubes grises, permanentes. Piensas que con el tiempo pasará, como todo, pero te equivocas. Cuando parece que empieza a salir el sol entre las nubes esponjosas y negras, se vuelve a cubrir. Y así mil veces más.  Pero esta vez, descarga. Caen miles y miles de gotas que se derraman y resbalan por tus mejillas en forma de lágrimas.  Te desgarran la piel que tocan porque cada una que te cae pesa toneladas y toneladas. Sientes que la angustia que tienes en el pecho te desgarra. Te pesa todo desde tu cuerpo hasta tu alma. De repente todo se complica, da mil vueltas. 

Pero no te preocupes porque después de la tormenta siempre llegará la calma.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Olvidar quince mil encantos es mucha sensatez. Borrar mil sonrisas es muy complicado. No recordar tus besos es imposible. Me cuesta tanto olvidarte...

jueves, 1 de septiembre de 2011

Amar, algo mundialmente conocido.

Todo el mundo habla y escribe acerca del amor. Digamos que es la palabra que más veces se repite a lo largo del día en todo el mundo aunque muy poca gente se para a pensarlo. Pero, ¿qué es el amor? Una palabra formada por solamente cuatro letras pero tan llena…tan llena de sentimientos, emociones, personas, caricias, besos, lugares, momentos y miles de cosas más. Y yo, que me considero una auténtica enamorada del amor, creo que aunque utilice todas las palabras cariñosas, dulces y llenas de sentimientos no podré expresar jamás lo que es realmente.  No podré expresar los miles de sentimientos y emociones que pueden surgir entre dos personas que se quieren, que se aman con locura, con tan solo rozarse, mirarse o dedicarse una pequeña sonrisa. Creo que es algo que no se puede definir ni con palabras, ni con dibujos, ni siquiera con gestos… es algo tan particular, tan propio y al mismo tiempo tan general, tan común.  Supongo que yo no lo puedo explicar porque es muy difícil explicar algo que en mi vida he sentido ¿no?  Aunque yo soy de las que pienso, y estoy convencida, que amar es algo que jamás se podrá describir ni entender al cien por cien hasta que lo sientas en tu propia piel y en tu propio corazón. Acaso no os creéis ¿Qué el corazón duele de tanto amar? Yo sí, lo creo con los ojos cerrados, es algo tan sumamente fuerte que hasta te hace daño, hasta te pesa tanto amor junto en un espacio tan reducido como un corazón.

Pararte a pensar un segundo: ¿Qué es lo que tiene que pasar entre dos personas para darlo todo por la otra? ¿Cuál es la reacción química o física que tiene que haber entre ellos para sentirse así? Ser dos persona en una… suena tan… increíble.

Atte.: una chica que todavía no ha amado.