lunes, 31 de enero de 2011

Tu libro.

Normalmente suelen comparar la vida como una gran película, tu gran película. Pues yo no. Yo voy a romper esa tradición y la comparare con un libro, el libro de tu vida. Si, literalmente. Este libro se compondrá de capítulos, como la gran mayoría. Pero estos capítulos no los escribirá el protagonista, todo lo contrario, los escribirá la persona o personas que lo vivan con él. Así poco a poco iras juntando muchos momentos vividos con todas las personas que han pasado a lo largo de tu vida, algunos buenos y otros no tan buenos, pero lo importante al fin y al cabo es con quien los vives. A medida que vaya pasando tu tiempo iras juntando más y más paginas, hasta que tú elijas terminar ese capítulo de tu vida con un punto y final. A continuación, comenzaras otro capítulo completamente distinto pero con algo en común con el anterior, que el protagonista seguirá siendo el mismo. Y volverás a repetir la acción anterior con cada persona de esta nueva etapa que aparezca en tu vida, te dejará su pequeño o gran párrafo escrito. Al final, cuando simplemente te quieras parar a pensar y ver quien realmente ha sido, es y probablemente será muy importante en tu vida. Abre tu libro por la primera página y comienza a leer todo lo que has vivido. Cuando termines probablemente te darás cuenta que en algunas de tus paginas aparecen personas que ya no están en tu vida y ya no sientes vacío por ello, porque otras personas han rellenado su trozo, si esas personas que aparecen sobre todo en tus últimas páginas. Pero lo más curioso es que en la mayoría de las páginas aparecen las mismas personas, esas con las que has vivido tantísimos momentos. Este libro será único e irrepetible, jamás existirá una copia mas buena o mas mala porque es incomparable. El libro que cada persona podríamos escribir sería único e inconfundible. Así que si algún día no te encuentras con ganas de seguir luchando, ni sonriendo, ni siquiera con ganas de abrir los ojos. Acude al pequeño libro que tienes escrito de una forma intachable en tu mente y léelo. Así te sentirás con ganas de añadir un nuevo capítulo a tu libro para que realmente en otro momento que tengas que recordarlo, lo hagas con una sonrisa de oreja a oreja. Levántate y lucha todos los días para que TU LIBRO MEREZCA SER LEÍDO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario